jueves, 25 de octubre de 2012

En el decir uno se anuda a aquello que se cree intenta ser. El silencio no optado pone en aprietos la identidad que los propios decires han ido construyendo en el mismo constructo que el hablante cree ser. 
Quizás de ahí que el silencio se haga por momentos la mejor respuesta o el terreno mas libre para aquel proyecto de ser de un mismo. 

No hay comentarios: