“por poco que la ciencia ponga de su parte, lo real se extenderá, y la religión tendrá entonces muchos más motivos aún para apaciguar los corazones. La ciencia, que es lo nuevo, introducirá montones de cosas perturbadoras en la vida de cada uno. Sin embargo, la religión, sobre toda la verdadera [la romana], tiene recursos que ni siquiera podemos sospechar. Por ahora basta ver cómo bulle. (…) Se tomaron su tiempo, pero de pronto comprendieron cuáles eran sus posibilidades frente a la ciencia. (…) Y sobre sentido conocen bastante, ya que son capaces de dar sentido a cualquier cosa: un sentido a la vida humana, por ejemplo”. Lacan a los Catolicos
fuente: http://www.facebook.com/photo.php?fbid=523849854332602&set=a.111564548894470.20281.100001227762658&type=1&theater
"El camino no es como una autopista; el Camino es como un pajaro que vuela en el viento sin dejar huella tras de sí" Osho
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lunes, 18 de marzo de 2013
Sexto principio del zen de Dogen: Butsu koyo no homon.
Aunque Buda sea nuestro ideal, en la vida cotidiana no debemos estar muy apegados. Hay que estar más allá de Buda. Si hay demasiado apego, lo separamos de nosotros y se vuelve entoncesun objeto exterior. Debemos ser el Buda que existe en nuestro cuerpo y en nuestro espíritu.
En la mayoría de las religiones, Dios o Buda son un objeto de fe al que la gente está apegada. Tal actitud denota un espíritu erróneo. En la conciencia, en el cerebro, se crea un dualismo entre uno mismo y el objeto de fe. La unidad se rompe. Esto no significa que no haya que respetar a Buda sino que no hay que depender de él. Actuar con un espíritu mushotoku, sin meta ni provecho, es la actitud más exacta. Un día un monje zen llamado Tanka quemó la estatua de Buda para mostrar que no hay que apegarse. La idolatría no existe en el budismo. El cristianismo, en cambio, habla siempre de un Dios exterior a quien hay que implorar con plegarias, así, después de la muerte, nos recompensará o castigará según nuestro comportamiento de todos los días.
Aquí y ahora, debemos encontrar a Dios o a Buda en nosotros mismos, volvernos Buda. Repito siempre que en zazen somos Budas vivientes. La estatua de Buda, por más que esté en el dojo, no es otra cosa que una escultura. No os apeguéis demasiado. Cuando entro en el dojo y hago sampai, me prosterno ante la estatua de Buda, pero también ante todos vosotros, Budas vivientes. Por el sampai se crea una unidad entre todos los discípulos y la fuerza cósmica. Cuando el discípulo despliega su zagu y toca el del maestro, es el símbolo de I shin den shin, la comunicación perfecta, la unidad entre maestro y discípulo.
Bustsu koyo no homon, más allá de Buda, es la puerta del Dharma. No hay que estar limitados por Dios o Buda, ni por los sutra, la biblia o los preceptos. La verdadera libertad existe en nuestro espíritu, más allá de Dios o Buda. Tal es la verdadera religión.
A menudo las religiones tradicionales imparten una enseñanza limitada. Por esta razón, poco a poco, pierden su fuerza. Debemos encontrar, aquí y ahora, la verdadera sabiduría más allá de la moral y de Buda. cuando leo los kai (preceptos) durante las ordenaciones, me respondéis: "si, si, si", así vuestro karma desaparece, se corta. Claro que vuelven a aparecer los bonno (las ilusiones), pero hay que observarlas como tales; por zazen se vuelven satori.
Zazen es el más alto de todos los kai. Ir más allá de Dios o Buda no significa que haya que ir en contra de la enseñanza de Buda. ¿Cómo hacer? A cada instante, crear la verdadera sabiduría de una manera fresca.
Taisen Deshimaru
fuente: http://www.facebook.com/photo.php?fbid=633262316699569&set=a.510506922308443.134848.510502865642182&type=1&theater
Aunque Buda sea nuestro ideal, en la vida cotidiana no debemos estar muy apegados. Hay que estar más allá de Buda. Si hay demasiado apego, lo separamos de nosotros y se vuelve entoncesun objeto exterior. Debemos ser el Buda que existe en nuestro cuerpo y en nuestro espíritu.
En la mayoría de las religiones, Dios o Buda son un objeto de fe al que la gente está apegada. Tal actitud denota un espíritu erróneo. En la conciencia, en el cerebro, se crea un dualismo entre uno mismo y el objeto de fe. La unidad se rompe. Esto no significa que no haya que respetar a Buda sino que no hay que depender de él. Actuar con un espíritu mushotoku, sin meta ni provecho, es la actitud más exacta. Un día un monje zen llamado Tanka quemó la estatua de Buda para mostrar que no hay que apegarse. La idolatría no existe en el budismo. El cristianismo, en cambio, habla siempre de un Dios exterior a quien hay que implorar con plegarias, así, después de la muerte, nos recompensará o castigará según nuestro comportamiento de todos los días.
Aquí y ahora, debemos encontrar a Dios o a Buda en nosotros mismos, volvernos Buda. Repito siempre que en zazen somos Budas vivientes. La estatua de Buda, por más que esté en el dojo, no es otra cosa que una escultura. No os apeguéis demasiado. Cuando entro en el dojo y hago sampai, me prosterno ante la estatua de Buda, pero también ante todos vosotros, Budas vivientes. Por el sampai se crea una unidad entre todos los discípulos y la fuerza cósmica. Cuando el discípulo despliega su zagu y toca el del maestro, es el símbolo de I shin den shin, la comunicación perfecta, la unidad entre maestro y discípulo.
Bustsu koyo no homon, más allá de Buda, es la puerta del Dharma. No hay que estar limitados por Dios o Buda, ni por los sutra, la biblia o los preceptos. La verdadera libertad existe en nuestro espíritu, más allá de Dios o Buda. Tal es la verdadera religión.
A menudo las religiones tradicionales imparten una enseñanza limitada. Por esta razón, poco a poco, pierden su fuerza. Debemos encontrar, aquí y ahora, la verdadera sabiduría más allá de la moral y de Buda. cuando leo los kai (preceptos) durante las ordenaciones, me respondéis: "si, si, si", así vuestro karma desaparece, se corta. Claro que vuelven a aparecer los bonno (las ilusiones), pero hay que observarlas como tales; por zazen se vuelven satori.
Zazen es el más alto de todos los kai. Ir más allá de Dios o Buda no significa que haya que ir en contra de la enseñanza de Buda. ¿Cómo hacer? A cada instante, crear la verdadera sabiduría de una manera fresca.
Taisen Deshimaru
fuente: http://www.facebook.com/photo.php?fbid=633262316699569&set=a.510506922308443.134848.510502865642182&type=1&theater
martes, 12 de marzo de 2013
CHI- KUNG : AL ARTE DE HACER FLUIR NUESTRA ENERGÍA
—12 days ago
Poco sabemos en Occidente sobre esta disciplina milenaria China que busca activar la energía del Chi y armonizarnuestros centros magnéticos, para liberarnos de condicionesy enfermedades que afectan nuestra salud, o para alcanzar lailuminación.
Chi significa aire o energía vital, es el aliento que anima las cosas, lo que está detrás de la respiración, y también lo que compone todo lo existente. El ser humano puede vivir y alimentarse gracias al chi obtenido, ya sea del aire o de la comida. Kung es trabajo, una disciplina que busca la perfección sistemática, idealmente durante todo el día. Ambas combinadas conforman el concepto de Chi Kung o Qigong, que sería el trabajo de energía, o el arte de hacer circular los hálitos de la manera más adecuada con la finalidad que se practica.
Chi significa aire o energía vital, es el aliento que anima las cosas, lo que está detrás de la respiración, y también lo que compone todo lo existente. El ser humano puede vivir y alimentarse gracias al chi obtenido, ya sea del aire o de la comida. Kung es trabajo, una disciplina que busca la perfección sistemática, idealmente durante todo el día. Ambas combinadas conforman el concepto de Chi Kung o Qigong, que sería el trabajo de energía, o el arte de hacer circular los hálitos de la manera más adecuada con la finalidad que se practica.
Los ejercicios que son mayoritariamente bípedos, buscanunificar los Tres Tesoros , que residen en un centro energético correspondiente a un nivel dentro del cuerpo, estos son la esencia vital (Jing) que habita en el bajo vientre y se relaciona con el cuerpo externo y la sexualidad, laenergía (Qi) la cuál habita en el centro del pecho relacionada con la respiración y función nutritiva, y el espíritu (Shen) que habita en el entrecejo y se relaciona con la mente y las emociones. Se realiza un movimiento fluido que abarca los 3 centros, pero no necesariamente todos los ejercicios lo hacen, también se hacen respiraciones en cada centro de manera aislada, pues existen movimientos específicos aislados y otros de integración. Armonizando estos 3 tesoros y por ende los 3 centros (dan tiens) se logra mejorar la salud integral de la persona.
“La enfermedad ocurre cuando hay desequilibrios en el flujo natural de esta energía. La utilidad terapéutica es nivelar este flujo yin- yang que debería correr de una manera fluida, pero hay estancamientos, pensamientos de bloqueos que desequilibran. El Chi-kung es volver a ese estado natural a través de nivel físico, mental y emocional”, explica Cristián Perelló,quien practica Chi Kung hace 10 años y por ahora da clases particulares.
Hay diferentes sistemas tradicionales de cultivo energético en China, algunos enfocados principalmente en la salud, otros que apoyan y elevan las corrientes filosófico espirituales como en el caso del taoismo, budismo y confucionismo, y también existen sistemas que fortalecen y profundizan las artes marciales.
Las tres regulaciones: San Tiao
El Chi Kung busca armonizar y regular los Tres Tesoros que ha hemos mencionado y para esto la concentración y respiración es fundamental. Al igual que el apoyo, que significa estar en un firme equilibrio con el suelo. Así se enraíza el cuerpo , que debe torcer un poco las rodillas para permitir el flujo de la energía, e imitar a los árboles echando raíces invisibles bajo los pies. De este modo nos anclamos a la tierra para empezar la práctica, pasando por el centro y luego llegando al cielo.
“La meditación de pie es un sistema interno, porque desde la atención y la respiración principalmente, sumado a la alineación correcta del cuerpo, estamos moviendo la energía”, explica Cristián.
Pascale Pontani, instructora de Chi Kung del Centro Minganos enumera los 10 beneficios que produce la práctica del Chi- Kung:
1. Mejora la función de los órganos vitales en general y de forma específica.
2. Fortalece músculos y tendones, aumenta la elasticidad.
3. Recupera la movilidad articular.
4. Corrige la postura.
5. Coopera con alivio de dolores producidos por ésta.
6. Desarrolla el equilibrio, calma la mente y el espíritu.
7. Mejora el humor.
8. Ayuda a drenar los estancamientos energéticos debido a enfermedades, emociones o lesiones.
9. Agudiza la concentración, expande la conciencia y el auto-conocimiento.
10. Funciona como medicina preventiva.
1. Mejora la función de los órganos vitales en general y de forma específica.
2. Fortalece músculos y tendones, aumenta la elasticidad.
3. Recupera la movilidad articular.
4. Corrige la postura.
5. Coopera con alivio de dolores producidos por ésta.
6. Desarrolla el equilibrio, calma la mente y el espíritu.
7. Mejora el humor.
8. Ayuda a drenar los estancamientos energéticos debido a enfermedades, emociones o lesiones.
9. Agudiza la concentración, expande la conciencia y el auto-conocimiento.
10. Funciona como medicina preventiva.
“Primero debes estar tranquilo; luego, tu mente podrá estar serena. Una vez que tu mente esté serena, estarás en paz. Sólo cuando estés en paz, serás capaz de pensar y progresar finalmente”, Confucio.
¿Has practicado Chi kung alguna vez? Cuéntanos qué tipo de Chi-kung conoces para que podamos ir.
Fuente: http://www.ciudadzen.com/medicina-complementaria/chi-kung-al-arte-de-hacer-fluir-nuestra-energia/
¿Has practicado Chi kung alguna vez? Cuéntanos qué tipo de Chi-kung conoces para que podamos ir.
Fuente: http://www.ciudadzen.com/medicina-complementaria/chi-kung-al-arte-de-hacer-fluir-nuestra-energia/
miércoles, 6 de marzo de 2013
Lo trataré de decir simple
Y si, lo trataré de decir simple. El Tarot es eso, el Tarot. Es un lenguaje, una forma de darle forma al
mundo, a los acontecimientos, eventos, formas mismas, etc., de las cuales
demandamos una explicación, un nombre. Una forma de encontrarle y darle
significado a aquello que el Yo va experimentando y registrando en su devenir.
Es un lenguaje antiquísimo y por lo mismo se le ha puesto en el lugar de una herramienta “mística” u oscura. Sin embargo, para quien profundiza en el estudio del Tarot este puede transformarse en una herramienta proyectiva desde donde podemos, eventualmente, articular respuestas que sean significativas para nuestras vidas o la vida del consultante.
Hay que recordar que el Tarot no sana, lo que sana es estar atento a cómo nuestras dinámicas inconscientes (que se ponen, en parte, de manifiesto con la ayuda de esta herramienta) se ponen en juego, en un momento dado, ante un evento particular. Y en esto el Tarot sólo nos sirve de espejo, de imagen útil para conocer y reconocer aspectos nuestros, pues como decía Antonio Porchia, y yo así lo comparto, “las certidumbres sólo se alcanzan con los pies”.
¿Y del futuro? No creo que el tarot sirva para predecir. Cuando un tarotista predice el futuro se pone a sí mismo en una posición de poder y dominio sobre el consultante. Posición bastante peligrosa puesto que ¿cómo sabemos si el futuro que se le realiza al consultante es el futuro en sí mismo o es la realización de una idea, tipo semilla, sembrada en el consultante por el tarotista? Y si predecir el futuro pudiera hacerse ¿qué tendría de mejor saber que, por ejemplo, voy a morir o tendré un accidente en un par de semanas, etc., etc.?... ¡viva tranquilo y viva atento! (mejor, como yo le diría, preguntemos por qué quisiera usted exponerse a situaciones peligrosas. Claro, si es que deseara realmente remediarlo)
En fin, el Tarot es tan solo un juego de cartas antiquísimo que, como cualquier lugar u objeto donde ponemos la intensión de aprender algo, nos entrega, desde su lenguaje y forma, mensajes que puedan ayudarnos a estar mas presente y en nuestro centro con nosotros mismos. Su forma, en particular el Tarot de Marsella, encierra un centenar de símbolos arquetípicos que diferentes tradiciones espirituales, y por siglos en la historia de la humanidad, han utilizado para trasmitir sus mensajes y que hoy en día aun están disponibles para nosotros.
Si quieres saber más, aprender del tarot o programar una consultar, puedes escribirme a norambuena_jorge@hotmail.com o encontrarme en mi facebook que esta mas abajo.
!Saludos!
Es un lenguaje antiquísimo y por lo mismo se le ha puesto en el lugar de una herramienta “mística” u oscura. Sin embargo, para quien profundiza en el estudio del Tarot este puede transformarse en una herramienta proyectiva desde donde podemos, eventualmente, articular respuestas que sean significativas para nuestras vidas o la vida del consultante.
Hay que recordar que el Tarot no sana, lo que sana es estar atento a cómo nuestras dinámicas inconscientes (que se ponen, en parte, de manifiesto con la ayuda de esta herramienta) se ponen en juego, en un momento dado, ante un evento particular. Y en esto el Tarot sólo nos sirve de espejo, de imagen útil para conocer y reconocer aspectos nuestros, pues como decía Antonio Porchia, y yo así lo comparto, “las certidumbres sólo se alcanzan con los pies”.
¿Y del futuro? No creo que el tarot sirva para predecir. Cuando un tarotista predice el futuro se pone a sí mismo en una posición de poder y dominio sobre el consultante. Posición bastante peligrosa puesto que ¿cómo sabemos si el futuro que se le realiza al consultante es el futuro en sí mismo o es la realización de una idea, tipo semilla, sembrada en el consultante por el tarotista? Y si predecir el futuro pudiera hacerse ¿qué tendría de mejor saber que, por ejemplo, voy a morir o tendré un accidente en un par de semanas, etc., etc.?... ¡viva tranquilo y viva atento! (mejor, como yo le diría, preguntemos por qué quisiera usted exponerse a situaciones peligrosas. Claro, si es que deseara realmente remediarlo)
En fin, el Tarot es tan solo un juego de cartas antiquísimo que, como cualquier lugar u objeto donde ponemos la intensión de aprender algo, nos entrega, desde su lenguaje y forma, mensajes que puedan ayudarnos a estar mas presente y en nuestro centro con nosotros mismos. Su forma, en particular el Tarot de Marsella, encierra un centenar de símbolos arquetípicos que diferentes tradiciones espirituales, y por siglos en la historia de la humanidad, han utilizado para trasmitir sus mensajes y que hoy en día aun están disponibles para nosotros.
Si quieres saber más, aprender del tarot o programar una consultar, puedes escribirme a norambuena_jorge@hotmail.com o encontrarme en mi facebook que esta mas abajo.
!Saludos!
viernes, 1 de marzo de 2013
"La última enseñanza del Buda y también del Maestro Dogen, la encontramos en el Shobogenzo, se llama “Hachi Dainin Gaku”, traducido como “Los ocho satori del gran hombre” -bueno, gran hombre o mujer-. “Dainin”, el gran hombre, es decir Buda, un Buda; y “Gaku”, tiene el sentido de intuición. Los ocho satori del gran hombre, las ocho prácticas, la actividad de una persona en relación con zazen.
El gran hombre, la gran mujer ¿qué es sino una persona convencida? Aquí hoy somos siete personas que no dudaron en salir bajo la lluvia. ¿Por qué? Por que estamos convencidos de esta práctica. Podemos decir que aquí hay siete ‘grandes’ personas, creo que esto es realmente aquí y ahora ser adultos en nuestra vida. Entonces, la persona convencida se dice: “eso, esta práctica está bien; esto quiero hacer, practicar; en esto quiero concentrarme”. Práctica y realización de la Vía al mismo tiempo, en unidad.
Estos ocho satori, prácticas, actividades, realizaciones, son la última enseñanza del Buda y del Maestro Dogen. El Maestro Dogen, en el Shobogenzo, lo expone de esta forma: el primer satori es ‘desear poco’. El segundo ‘estar satisfecho con lo que tenemos’. Tercero es ‘disfrutar de la tranquilidad’. El cuarto es ‘practicar la atención justa’. El quinto es ‘no crear ilusión’. El sexto es ‘practicar zazen’. El séptimo ‘practicar la sabiduría’. Y el último: ‘no discutir’.
Algo que podemos ver es que cada práctica, cada satori, lleva al siguiente: Si ‘deseo poco’, pues puedo ‘estar satisfecho con lo que tengo’. ‘Estando satisfecho con lo que tengo’ estoy tranquilo, mi mente no corre detrás de algo, y puedo ‘disfrutar de tranquilidad’. ‘Disfrutando de tranquilidad’ puedo, en zazen, concentrarme de un solo espíritu, en mi postura, y ‘practicar la atención justa’. ‘Practicando la atención justa’ ‘no creo ninguna ilusión’, estoy totalmente aquí y ahora, concentrado en la postura. Todo esto me lleva al sexto satori, sexta realización: ‘practicar exactamente zazen’, el mismo zazen que hemos recibido, el transmitido, el mismo que el Maestro Kosen, el Maestro Deshimaru, Kodo Sawaki, Dogen, Bodhidharma, Buda… El mismo, ninguna separación. Practicar esta realización es ‘practicar la sabiduría’. Y cierro este círculo, “Do”, el Anillo de la Vía, con el octavo y último satori que es ‘no discutir’. De hecho, ¿qué habrá por discutir?
Es una vía simple y luminosa."
Maestro Soko.
de: http://www.facebook.com/photo.php?fbid=623204634372004&set=a.510506922308443.134848.510502865642182&type=1&theater
El gran hombre, la gran mujer ¿qué es sino una persona convencida? Aquí hoy somos siete personas que no dudaron en salir bajo la lluvia. ¿Por qué? Por que estamos convencidos de esta práctica. Podemos decir que aquí hay siete ‘grandes’ personas, creo que esto es realmente aquí y ahora ser adultos en nuestra vida. Entonces, la persona convencida se dice: “eso, esta práctica está bien; esto quiero hacer, practicar; en esto quiero concentrarme”. Práctica y realización de la Vía al mismo tiempo, en unidad.
Estos ocho satori, prácticas, actividades, realizaciones, son la última enseñanza del Buda y del Maestro Dogen. El Maestro Dogen, en el Shobogenzo, lo expone de esta forma: el primer satori es ‘desear poco’. El segundo ‘estar satisfecho con lo que tenemos’. Tercero es ‘disfrutar de la tranquilidad’. El cuarto es ‘practicar la atención justa’. El quinto es ‘no crear ilusión’. El sexto es ‘practicar zazen’. El séptimo ‘practicar la sabiduría’. Y el último: ‘no discutir’.
Algo que podemos ver es que cada práctica, cada satori, lleva al siguiente: Si ‘deseo poco’, pues puedo ‘estar satisfecho con lo que tengo’. ‘Estando satisfecho con lo que tengo’ estoy tranquilo, mi mente no corre detrás de algo, y puedo ‘disfrutar de tranquilidad’. ‘Disfrutando de tranquilidad’ puedo, en zazen, concentrarme de un solo espíritu, en mi postura, y ‘practicar la atención justa’. ‘Practicando la atención justa’ ‘no creo ninguna ilusión’, estoy totalmente aquí y ahora, concentrado en la postura. Todo esto me lleva al sexto satori, sexta realización: ‘practicar exactamente zazen’, el mismo zazen que hemos recibido, el transmitido, el mismo que el Maestro Kosen, el Maestro Deshimaru, Kodo Sawaki, Dogen, Bodhidharma, Buda… El mismo, ninguna separación. Practicar esta realización es ‘practicar la sabiduría’. Y cierro este círculo, “Do”, el Anillo de la Vía, con el octavo y último satori que es ‘no discutir’. De hecho, ¿qué habrá por discutir?
Es una vía simple y luminosa."
Maestro Soko.
de: http://www.facebook.com/photo.php?fbid=623204634372004&set=a.510506922308443.134848.510502865642182&type=1&theater
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