miércoles, 6 de marzo de 2013

Lo trataré de decir simple

Y si, lo trataré de decir simple. El Tarot es eso, el Tarot. Es un lenguaje, una forma de darle forma al mundo, a los acontecimientos, eventos, formas mismas, etc., de las cuales demandamos una explicación, un nombre. Una forma de encontrarle y darle significado a aquello que el Yo va experimentando y registrando en su devenir.

Es un lenguaje antiquísimo y por lo mismo se le ha puesto en el lugar de una herramienta “mística” u oscura. Sin embargo, para quien profundiza en el estudio del Tarot este puede transformarse en una herramienta proyectiva desde donde podemos, eventualmente, articular respuestas que sean significativas para nuestras vidas o la vida del consultante.

Hay que recordar que el Tarot no sana, lo que sana es estar atento a cómo nuestras dinámicas inconscientes (que se ponen, en parte, de manifiesto con la ayuda de esta herramienta) se ponen en juego, en un momento dado, ante un evento particular. Y en esto el Tarot sólo nos sirve de espejo, de imagen útil para conocer y reconocer aspectos nuestros, pues como decía Antonio Porchia, y yo así lo comparto, “las certidumbres sólo se alcanzan con los pies”.

¿Y del futuro? No creo que el tarot sirva para predecir. Cuando un tarotista predice el futuro se pone a sí mismo en una posición de poder y dominio sobre el consultante. Posición bastante peligrosa puesto que ¿cómo sabemos si el futuro que se le realiza al consultante es el futuro en sí mismo o es la realización de una idea, tipo semilla, sembrada en el consultante por el tarotista? Y si predecir el futuro pudiera hacerse ¿qué tendría de mejor saber que, por ejemplo, voy a morir o tendré un accidente en un par de semanas, etc., etc.?... ¡viva tranquilo y viva atento! (mejor, como yo le diría, preguntemos por qué quisiera usted exponerse a situaciones peligrosas. Claro, si es que deseara realmente remediarlo)

En fin, el Tarot es tan solo un juego de cartas antiquísimo que, como cualquier lugar u objeto donde ponemos la intensión de aprender algo, nos entrega, desde su lenguaje y forma, mensajes que puedan ayudarnos a estar mas presente y en nuestro centro con nosotros mismos. Su forma, en particular el Tarot de Marsella, encierra un centenar de símbolos arquetípicos que diferentes tradiciones espirituales, y por siglos en la historia de la humanidad, han utilizado para trasmitir sus mensajes y que hoy en día aun están disponibles para nosotros.







Si quieres saber más, aprender del tarot o programar una consultar, puedes escribirme a norambuena_jorge@hotmail.com o encontrarme en mi facebook que esta mas abajo.

!Saludos!

No hay comentarios: