


Después de la muerte, de la transformación y la purificación del campo donde iremos a sembrar, las semillas pueden ser bien plantadas en la medida en que nos conectemos con nuestra pureza, pureza relacionada a nuestra ánima y la armonía de nuestro cuerpo emocional, físico e intelectual. ¿Cuál puede ser un buen camino para encontrar este equilibrio? La meditación, que nos conecta con un mundo distinto, que nos cuelga al precipicio de nosotros mismos y nos hace ver, con disciplina, aquel o aquello que realmente somos.
Namaste.
No hay comentarios:
Publicar un comentario