domingo, 7 de agosto de 2011

¿Reforma a la Educación o solo a la Enseñanza?

Sinceramente, y siendo muy responsable de las palabras que aquí emito, a veces siento que el movimiento estudiantil chileno no tiene claro el norte de sus aspiraciones. Principalmente empiezo a dudar de que es lo que se quiere al momento de pedir, con todo el derecho de ser ciudadanos, cuando hablamos de mejoras en la educación.

Si bien estoy completamente de acuerdo con que las condiciones educacionales de un país son la base de una buena sociedad, y que la educación debe ser un derecho para todos, asegurado, gratuito y protegido por el Estado (o por ultimo con menor costo económico si pensamos en que alguien que, ejerciendo su libre derecho, quiera pagar por algún tipo de educación especial), estoy comenzando a notar que el término “Educación” no está siendo bien utilizado al momento de generar los petitorios estudiantiles.

Yendo a la más básica de las normas lingüísticas que nos rigen, la RAE, deberíamos o podríamos entender la “educación” como la acción y efecto de educar. Evidentemente eso no nos lleva a ni una parte y es por eso que debemos ir más profundo en busca de una definición que logre hacer sentido con lo que esperamos se nos entregue. Por lo anterior, y sobre la misma definición, encontramos que la educación es “Crianza, enseñanza y doctrina que se da a los niños y a los jóvenes.” Hasta aquí ni un problema, y es más, apunta hacia donde queremos llegar con este movimiento estudiantil, sin embargo yendo una definición más al fondo nos encontramos con que la educación es también “cortesía y urbanidad.” Es aquí donde sinceramente aparece mi preocupación.

Debo decir que si bien es posible observar un gran trabajo en pos de la educación chilena en estos últimos meses, no he visto que la mayoría de nosotros tenga una real tendencia hacia la cortesía y la urbanidad, y esto sería muy preocupante ya que esto es un sostén de la misma “educación” que estaríamos pidiendo. Siguiendo esta misma línea, y volviendo a la definición de la RAE, podemos encontrar que la definición de urbanidad hace alusión a la “cortesanía, comedimiento, atención y buen modo”. Siguiendo de definición en definición de estos últimos términos (que ya para muchos nos pueden sonar muy lejanos a nuestra realidad lingüística) todos van volviendo sobre sí mismos a una síntesis que podríamos entender como, el buen modo, la cortesía, y la atención, además de la enseñanza. Lamentablemente poco hemos visto de esto en las últimas manifestaciones, tanto de marchas publicas como opiniones emitidas.

Leyendo un par de veces las definiciones que acabamos de estudiar me doy cuenta, sobre todo en la reiterada utilización de garabatos entre mis pares, la poca capacidad de generar ideas nuevas y criticas y el nulo buen modo o la cortesía al momento de manifestar su desaprobación o el rechazo a alguna idea contraria al movimiento (principalmente venidas por parte de personajes del gobierno), y por lo mismo quizás no estamos aspirando a una real mejora de la educación, ya que no estamos nosotros siendo ejemplo de aquello que queremos ver.

Yendo un poco más lejos, me tome la molestia de indagar en palabras que quizás si nos hagan más sentido como movimiento estudiantil, y fue así como me encontré con (imaginándolo desde un principio) la palabra “Enseñanza”. Tomando como referencia el mismo diccionario de la Real Academia, cito algunas de las definiciones que ahí se encuentran para este término:

1. f. Acción y efecto de enseñar.

2. f. pl. Conjunto de conocimientos, principios, ideas, etc., que se enseñan a alguien.

3. f. La que depende directa y totalmente del Estado.

4. f. La que depende del Estado o de las entidades territoriales.

5. f. La que comprende los estudios especiales que requiere cada profesión o carrera; p. ej., derecho, medicina, etc.

Lo anterior son solo algunas de las definiciones que van más al caso de lo que aquí quiero tratar, y que en definitiva no es mucho más de lo que la misma definición por si sola nos puede aclarar.

Teniendo en cuenta que pasamos por un intenso proceso social de cambio, me parece sumamente importante tener claro desde donde y hacia dónde nos dirigimos, siendo esta la única forma de que no existan debilidades para que el movimiento pase a ser un movimiento político en vez de un movimiento donde lo que en verdad importa es la “educación”, sin embargo, y como intento manifestar en estas simples líneas, siento que muchos de nosotros no tiene ni siquiera claro lo que la expresión “educación” tiene por significado y como, en pos de ella misa, estamos boicoteándola con nuestros propios actos lo que pedimos al Estado.

Como muchas veces he planteado me parece realmente preocupante la forma en que nosotros, como jóvenes y futuro de esta sociedad, nos expresamos acerca de otros y pretendemos generar cambios en base a algunas simples palabras que realmente ni siquiera entendemos, puesto que de ser así sería muy difícil encontrarnos con comentarios en medios masivos de comunicación que a duras penas tienen cuatro de diez palabras que no corresponden a un garabato de alto calibre o una idea o frase que se repite ya al modo de slogan y que poco conocimiento de su historia tendrá quien lo emite (admito que podría estar cayendo en un sesgo, sobre todo en lo ultimo).

En resumen, me parece que, y simplemente siguiendo algo tan básico como la definición típica de dos conceptos a través del diccionario de la Real Academia Española (que por lo demás nos rige o nos da marco de referencia) como sociedad no nos damos cuenta (o no nos queremos dar cuenta) que lo único que estamos pidiendo es que se mejore o se vuelva a la enseñanza estatal y no así una mejora de la educación, y que con ella podamos manejar mayor cantidad de información (y puede ya ir usted a ver que realmente significa esta palabra a la Rae) para llegar a ser personas de éxito, pero no realmente personas educadas, porque de ser así, creería que en primer lugar comenzaríamos nosotros mismos con nuestra propia educación y demostrar, a quien queramos, que somos realmente merecedores de aquello que promulgamos y que queremos ver en las generaciones que serán nuestros hijos y nuestros nietos.

Para finalizar entonces solo me queda dejarle la pregunta sin mayores eufemismos: ¿quiere realmente usted más información o una verdadera educación?



































Pd: Los dejo invitados a ver la entrevista al Psiquiatra Otto Dorr, quien manifiesta la preocupación por lo bajo que estamos llegando los chilenos en el uso del lenguaje y como esto podría tener consecuencias patológicas.

http://www.unabellezanueva.org/otto-dorr/

No hay comentarios: